Todas las calles se están llenando de luces navideñas indicándonos cómo ha de ser el espíritu para acabar este 2020, si hay algo que caracteriza a los cierres de año y a las fiestas navideñas son las reuniones y los malentendidos en ocasiones. Si hay una forma de minar la moral durante el confinamiento es esos malentendidos que creemos tener, por la distancia, la falta de comunicación, el no vernos, el no me ha llamado,…
Afrontar los conflictos sociales y familiares
En definitiva aparecen los conflictos que tan pocas ganas de tener por lo general solemos tener, de hecho en las encuestas que se realizan en las empresas la mayoría de las personas prefieren trabajar en un ambiente tranquilo y relajado en el que se respire armonía. Sin embargo, quiero que te quede bien claro esto que voy a decirte, como expertos en coaching personal, entendemos que el conflicto es necesario y es inevitable, aquella persona que no quiera enfrentarse al conflicto para disolverlo, se enfrentará a la larga a un conflicto mucho mayor, por lo que lo mejor es cuando hay un conflicto trabajarlo. ¿Qué por qué digo que el conflicto es necesario? Muy sencillo es la forma en la que tenemos de crecer como equipo, familia, como personas, enfrentándonos a situaciones nuevas que nos suponen un reto.
Y como cada uno somos de nuestro padre y nuestra madre, resulta que cada uno hacemos las cosas de una manera diferente, es entonces cuando aparece el conflicto, cuando no existe una diferencia de opiniones y según se genere y se resuelva puede convertirse en un quiste que crea mal ambiente y por el que saltan chispas o puede ser simplemente una discusión puntual.
Si hace memoria sobre las situaciones incómodas que has vivido, muchas de ellas se generan por el tono con el que se dicen las cosas, en muchas ocasiones habrás escuchado aquello de no es lo que dices sino cómo lo dices.
Formas de gestionar los conflictos correctamente
Según se generan esos conflictos y según se resuelven esos conflictos se revela el carácter de la persona. De acuerdo a Ken Thomas y Ralph Kilmann, cada persona tiene cinco formas de gestionar el conflicto, aunque por lo general suele tenerse un par de maneras preferidas. Conocer la diferentes maneras de la gestión de conflictos te ayudará saber cómo te gustaría reaccionar ante el conflicto y a conocerte a ti mismo al identificar cómo reaccionas en la actualidad ante el conflicto.
Ken Thomas y Ralph Kilmann, realizaron una división de resolución de conflictos basándose en 2 variables la comunicación asertiva y la cooperación, según el grado en el que se utiliza cada una de estas 2 variables aparecen 5 estilos de resolución de conflictos.
Estilo competitivo
En este caso el objetivo es llevar la razón y ganar a toda costa, pese a quien pese, y no importando las consecuencias. Aquellos que eligen este tipo de conducta no escuchan a otros y lo que les motiva es salirse con la suya convenciendo a los demás que su opinión es la más acertada.
Estilo Evasivo
Esta es la actitud de las personas que no quieren reconocer el conflicto y lo evitan. Puede ser efectivo cuando consideramos que no es el momento o el lugar para tratar el conflicto o cuando es un asunto incómodo a tratar y lo eso lo evitamos.
En ocasiones se produce el aplazamiento cuando la persona considera que la resolución no le aporta un beneficio.
Estilo Complaciente
Al adquirir este estilo resolutivo estamos tomando en cuenta cómo afecta el conflicto a los demás, prestando más atención a otros que a nuestros propios intereses. Siendo en la mayoría de ocasiones los más flexibles los que ceden antes los demás.
Este tipo de actuación se toma cuando la relación es más importante que el conflicto ya sea por aprecio, respeto, generosidad, por evitar problemas mayores o por ser conscientes de la intransigencia de la otra persona, …
Estilo Colaborador
Cuando trabajamos en esta línea se busca que todas los afectados por el conflicto queden satisfechas.
Para conseguir este tipo de resolución es necesario trabajar la escucha activa, y la asertividad, este es el modo preferido de resolución de conflicto para aquellos que desean mantener la buena relación entre las partes y en aquellos casos en lo que el tiempo no es un impedimento y se prima una solución en la que todos ganen.
Estilo comprometido
Es un estilo intermedio entre todos los anteriores, y se emplea para llegar a soluciones intermedias de consenso en las que todos ceden un poco. No tiene que ser la opción que deseabas pero es una opción con la que puedes vivir. Cuando empleamos LEGO® SERIOUS PLAY® para la resolución de conflictos este es el tipo de soluciones que solemos alcanzar, una en la que todas las parte implicadas pueden acuerdan una solución única.
Según los creadores de este modelo los estilos usados por orden de preferencia son: colaborador, complaciente, competitivo y finalmente el comprometido y el evasivo.
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Laura Bueno es coach experta en coaching personal y de equipos. Posee certificados como Practitioner con la metodología PROSCI & ADKAR, además de ser facilitadora de Lego® Serious Play® para conseguir una mejor comunicación y gestión del cambio. Cree profundamente en la fuerza del trabajo en equipo, tanto de grandes como de pequeñas organizaciones. Su objetivo es ayudar a personas y equipos a desarrollarse y lograr la vida que deseas.